viernes, 12 de octubre de 2012

Oxídate conmigo


Una de las piezas más intensas de nuestra exposición de poesía visual es ésta.

El ejercicio de hoy es escribir una declaración de amor o de amistad que contenga esta frase: óxídate conmigo.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

El oxido es producto del oxigeno y esto fue lo que acabo de respirar con mucho orgullo en el articulo acerca de nuestra amada biblioteca que apareció en El País de hoy Domingo 14 de Octubre de 2012. Aparece mencionado y en foto Josean Rojo ¡Enhorabuena!

BRAGAOMEANO dijo...

Oxidado de tanto esperar el fin,
eso si, siempre a tu lado.
Viene el invierno frió y húmedo,
las tinieblas ganan al sol.
Siento las articulaciones dolorosas y sonoras, clack, clack. ¿Me estaré oxidando ?. Y me pregunta mi mujer por acontecimiento de hechos pretéritos de nuestra vida. Yo no recuerdo nada, el oxido se debe estar haciendo también dueño de mi inútil cerebro. Bebe Coca-Cola que dicen que quita el oxido de los tornillos. Pero a mi me gusta con zumo de malta escoces.
Mientras sigo oxidado cansado de esperar el fin a tu lado. Aunque solo tu eres el 3 en 1 de mi vida.

bea fdez dijo...

"Los óxidos son compuestos químicos formados por hierro y oxígeno"
Wikipedia

Dices que soy frío como el hierro. Es cierto que siempre me costó expresar mis sentimientos. Pero el hierro, además de frío, es duro. Yo también lo era: una persona fuerte, invencible. Ahora me estoy oxidando, ya no soy lo que era,... Tengo miedo de perderte y me doblo con facilidad. Cumplo todos tus deseos, tus caprichos. No quiero que te vayas.
Eres mi oxígeno: sin ti no respiro y eres tú quien me está oxidando. No me importa. El hierro también tiene características magnéticas. Atrae. Tú también puedes ser hierro. ¡Convierte en hierro, juntémonos y oxídate conmigo!

Daniela Hernández dijo...

Oxídate conmigo. Que tus inestables átomos me cedan sus electrones y formen conmigo, elemento nuevo que entra en tu vida, un compuesto de permanencia en el tiempo y el espacio.
Oxídate conmigo. Que los átomos de tu risa se mezclen con los míos , no por culpa de… si no gracias al aire que respiramos juntos.
Oxídate conmigo. Que tu piel y mi piel envejezcan juntas con las manchas del paso del tiempo en su epidermis. Luciendo orgullosas.
Oxídate conmigo. Que los átomos de tu sabiduría me cedan sus electrones para unirlos a mi pensamiento y no ser tú ni yo si no una sabiduría nueva .
Oxídate conmigo pero lentamente, sin reproches, sin preguntarnos quién cedió y quién aceptó. Unidos en la idea de que juntos creamos elementos nuevos.